viernes, julio 21, 2006

Sexta Bienal de Venecia de Bogotá / 2006

2006

En esta ocasión el país invitado de honor fue El Reino Unido (Particularmente el País de Gales), y el tema central de la convocatoria fue EXCLUSIÓN / INCLUSIÓN, atendiendo a las últimas actividades de la Bienal y de su grupo de trabajo TÄI / The Art Incubator el cual fue invitado a la ciudad de Liverpool, para transcribir el ejercicio de Venecia en Kensington, un área de ésta ciudad, con características similares al Barrio Venecia en Bogotá.

La intención básica giró en torno al planteamiento de estrategias, soluciones o señalamientos que aborden los conceptos de exclusión / inclusión como herramienta de articulación de las minorías a nuevos contextos, como una estrategia de convivencia o simplemente como el intercambio de conocimiento y experiencias que puedan cualificar de alguna manera, la tolerancia, el bienestar comunitario y el trabajo en equipo.

En esta edición de la Bienal, un local de un centro comercial del barrio (Centro Comercial Venecia Plaza) fue la sede central de la exposición. En este espacio, se exhibieron los referentes de las obras que se apropiaron del espacio público del barrio y en algunos casos de los espacios privados a los cuales dieron un amable acceso algunos de los habitantes del barrio.

Quinta Bienal de Venecia de Bogotá / 2003

2003

La Bienal fue invitada nuevamente a un evento académico; las mesas de debate de la feria de arte contemporáneo ARCO, Madrid 2002, donde causó gran interés por el número de versiones realizadas, el mantenimiento del planteamiento inicial y la capacidad de acomodarse a nuevas condiciones del medio y de la situación de la plástica en Bogotá.

En Madrid, se hizo la invitación oficial a España como huésped de honor para la V edición en el año 2003. En esta ocasión la temática planteada es AMÉRICA 3 x 1, pague 1 y lleve 3, aludiendo a la utopía de la unión de las Américas en una sola y soberana, en el fenómeno de migración que aqueja ahora a España ya otros países de Ibero América como consecuencia de éxodo colombiano debido a la violencia, y en la estrategia informal de venta en las calles de Venecia, pague 1 y lleve 3.

Cuarta Bienal de Venecia de Bogota / 2001

2001

La alta visibilidad de la Bienal de Venecia en este punto, produjo una serie de reacciones muy particulares en el medio. Un gran número de los artistas convocados pretendieron participar en la Bienal si hacer el acercamiento previo al barrio que esta consignado en la convocatoria oficial, otros artistas planteaban obras que involucraban espacios públicos y comunidades determinadas que aparentemente rimaban con el “espíritu” de la Bienal.

Algunos artistas locales llegaron a exigir su participación en el evento simplemente por vivir en el barrio, sugiriendo que la preselección (necesaria en cualquier evento de este tipo) era una forma de discriminación. El préstamo espacio que antes era gentilmente cedido por la Junta de Acción Comunal de Barrio Venecia, nos fue negado en esta edición, de hecho, la junta nos cobró una renta imposible de pagar y fue necesario alquilar un local comercial vacío para poder realizar el evento, esto suscitó varios inconvenientes y cierto malestar en los artistas y los organizadores, inconvenientes que por fortuna se solucionaron posteriormente.

Gracias al la inclusión de la Bienal en el Proyecto Nexo del Convenio Andrés Bello, la Bienal fue invitada a un evento académico en el marco del Salón Pirelli de Arte Joven en Caracas en el año 2000. En esta visita aprovechamos la oportunidad para invitar a Venezuela como huésped de honor en esta edición de la Bienal. En este punto la Bienal se convertía en un evento Internacional con mayores alcances y con más miradas que vendrían a enriquecer el proceso inicial, y a promover vínculos con importantes entidades culturales internacionales. Una de estas entidades ratificó su apoyo y ofreció la galería del Istituto Italiano di Cultura como espacio alterno para la realización de la Bienal de Venecia, de esta manera en aquella ocasión el Instituto gentilmente cedió su galería apara la exhibición de algunas de las obras y permitió que la Bienal se acercara a otras localidades a interesara a oros públicos.

En esta ocasión y para lograr que todos los artistas participaran en los “mismos términos” se planteó una temática desde la cual partió la estrategia curatorial. Esta Temática fue Arte y Gastronomía, que con el lema, porque no todo entra por los ojos, se planteaba una interesante discusión a partir de un concepto que visto desde múltiples ángulos y articulados con el contexto específico del barrio Venecia, proveían al artista de buenas herramientas para plantear un proyecto, objetual o procesual. Así. Los artistas, de cualquier grupo participativo, tenían que cumplir con un temática particular, plantear su propuesta desde el barrio como territorio y articularlos con sus proceso, técnicas e intereses particulares para poder participar.

El experimento surtió efecto y las obras fueron mucho mas claras y contundentes, el espacio público se aprovechó de una manera más efectiva y los artista locales entraron en la dinámica de participación de eventos plásticos como la Bienal, a diferencia de otros procesos que no se preocupan en la pertinencia de la obra con su contexto, sino que se convierten en simples muestreos de obras dispuestas en un espacio comunal, cuya única coincidencia es que sus ejecutantes habitan en un sector común.


PARTICIPANTES

1. ORLANDO CASTAÑEDA
2. GRUPO SEGUNDO TRES CABEZAS
3. NICOLAS MÉNDEZ
4. GRUPO INDIVIDUAL
5. MARÍA ISABEL RUEDA
6. ANDRÉS MATUTE
7. GRUPO GUILLERMO SIN CASA
8. FRANCISCO ACOSTA
9. SERGIO VEGA
10. NADIA MORENO
11. GRUPO EMPRESA CULINARIA
12. GRUPO COLECTIVO MASKI
13. PABLO ADARME
14. GRUPO DE DOS SABORES
15. RODEZ
16. MILER LAGOS
17. GUSTAVO VILLA Y FRAIZER
18. GRUPO LUISA UNGAR Y BÁRBARA SANTOS
19. GRUPO PAN CREAS
20. ANTONIO CARO
21. GRUPO OSCAR ARDILA Y CAMILO PÁEZ
22. ANA KARINA MORENO
23. KAROL GUERRERO
24. GRUPO AVENARE
25. GRUPO EXPENDIO
26. OSCAR MORENO
27. GRUPO MARGARITA GONZÁLEZ Y ANA DELGADO
28. MARÍA CATALINA GARCÉS
29. RICARDO SANCHÉZ
30. DORIS MAYORGA
31. AUDINO DÍAZ
32. NELA OCHOA
33. TILENA MORALES
34. ADRIANA MORALES
35. AGAPITO GALÁN

ALGUNAS IMÁGENES

Obra de Pablo Adarme

Tercera Bienal de Venecia de Bogotá / 1999

1999

En la tercera edición de la Bienal nuestro enfoque cambió. No era ya tan importante el posicionamiento del evento en el medio, sino el acercamiento que el evento pudiera lograr con los habitantes de Venecia y sus alrededores. De hecho, en esta edición el número de artistas locales participantes fue mayor que en las anteriores Bienales, para esto, logramos contactarnos con las asociaciones de artistas, organizaciones de artistas informales y artistas independientes con el fin de reunirlos explicarles el proyecto y motivarlos a participar de la Bienal. El resultado fue muy interesante y la Bienal se hacía conocer cada vez más en el contexto que le dio origen.

Los artistas seguían interesados en intervenir el espacio urbano. De hecho, algunos de los proyectos planteaban interesantes modificaciones del barrio, nuevos canales de comunicación y otros hacían comentarios sobre la violencia de los sectores menos favorecidos o enunciaban propuestas ante paradigmas vigentes en el arte contemporáneo. El resultado fue muy interesante, pero las propuestas se alejaban unas de otras. Así, En vista de la disparidad de la formación de sus ejecutantes y la falta de metodología para la presentación de proyectos artísticos a un evento como la Bienal de Venecia, que día a día iba asegurando su lugar en el panorama de la plástica nacional.

Segunda Bienal de Venecia de Bogotá / 1997

1997

Bajo los mismos parámetros generales de la primera edición, la II Bienal de Venecia se desarrolló en el mismo espacio, el Salón Comunal de Venecia, pero con artistas en su mayoría ampliamente reconocidos en el medio artístico nacional, quienes quisieron apropiarse del espacio urbano. De esta manera, un alto porcentaje de las obras se desarrollaron en el parque, las tiendas, las casas y toda suerte de espacios alternos diferentes al Salón Local que en principio, tenía una actitud totalmente museal.

El interés en la Bienal por parte de los medios, se justificó gracias al nivel de los participantes y a la recursividad de las propuestas. Las obras de los artistas locales, de otro lado, se vieron contrastadas con las obras de los artistas de trayectoria reconocida, esta característica llevó a la Bienal a pensar en la manera de cualificar estas obras y los procesos, lo cual se pondría en funcionamiento más a delante.

Primera Bienal de Venecia de Bogotá / 1995

1995

La I Bienal de Venecia surgió en un momento particular del arte bogotano, donde tanto los discursos oficiales, al igual que los espacios para el arte contemporáneo se veían desgastados, reiterativos, sobrepolitizados y algo ajenos.

El planteamiento inicial fue desplazar el arte de los espacios habituales u oficiales hacia otros menos establecidos o dispuestos, para poder acopiar nuevos públicos y forzar un poco el proceso de cada artista, al enfrentarse a un contexto específico. El tener que relacionar su trabajo con los espectadores que lo leerán posteriormente permitió un serie de aproximaciones entre autor-espectador-contexto que activó nuevas estrategias de interrelación entre ellos.

El sarcasmo y la paradoja, a consecuencia del reflejo mimético que planteó la Bienal con su homóloga Italiana: La Biennale Di Venecia, se convirtieron desde el principio en efectivos ganchos publicitarios para que los medios asistieran en forma masiva al evento. El impacto fue tal que pese a que muchas personas del medio artístico no estuvieron presentes en el evento, permanecieron al tanto día a día de su desarrollo, gracias a los artículos y las entrevistas que desde muchos ángulos registraban constantemente la realización de la Bienal.